La milenaria muralla, construida para proteger la frontera norte del Imperio Chino de los frecuentes ataques de los nómadas de Mongolia y Manchuria, es una fuente inagotable de datos, anécdotas, curiosidades y leyendas, algunas de estas no del todo precisas, ¿que os parece si repasamos unas pocas?
Datos hay de todas clases, como por ejemplo su construcción, que se prolongó a lo largo de dos milenios, y es que, con una longitud de más de 21000 kilómetros, el esfuerzo por construirla y las dificultades técnicas que imponían algunos tramos eran tremendas. Sus origines se sitúan en el año 221 A.C y no fue finalizada hasta el año 1644.
También es un dato alucinante el que durante este periodo de tiempo en su construcción se hayan visto implicadas decenas de millones de personas, algunas mediante trabajos forzados (delincuentes). Pero también había soldados y trabajadores asalariados.
Los materiales que se usaban para su construcción obviamente eran sacados de los alrededores, por eso hay tantas diferencias entre los diversos tramos, tanto en su arquitectura como en su composición. Podemos encontrar así tramos de piedra caliza, de granito, de ladrillo cocido, pero en sitios más cercanos al desierto, como el en Gobi, su construcción era mucho menos robusta, por lo que el tiempo a conservado la estructura malamente.
Las atalayas que podemos ver continuamente en su extensión servían para advertir a otros tramos de la presencia de enemigos, así con señales de humo, sonido, o destellos, se iban avisando de una a otra para que las tropas se desplazaran urgentemente.
Se tiende a pensar y se a propagado como una verdad que la Gran Muralla China es la única construcción humana que puede verse desde el espacio, lo cierto es que esto no es verdad, ningún astronauta ha confirmado esto. En cambio, se dice que las pirámides si son observables, algo más lógico pues su estructura se concentra más masivamente.
Y un dato irrefutable es que es una de las grandes atracciones turísticas de China, y que algunos tramos, sobre todo los más cercanos a la capital y en días festivos pueden lograr concentraciones de miles de personas lo que hace que caminar sobre la muralla sea realmente difícil.
Por eso, recomiendo, tal como hicimos nosotros, ir a lugares menos turísticos, para visitarla con calma, eso si tener en cuenta que hay tramos que pueden ser peligrosos por su abandono.
No hay comentarios:
Publicar un comentario