lunes, 19 de agosto de 2019

FUSHIMI INARI EL SANTUARIO DE LOS 30000 TORII (FUSHIMI - PREFECTURA DE KIOTO - JAPÓN)

Fushimi Inari

El santuario sintoísta Fushimi Inari, es uno de los santuarios más conocidos de Japón, y también uno de los más antiguos (año 711). Este santuario es el principal de los dedicados al dios Inari (en Japón hay miles dedicados a él).

Inari es el dios del arroz, y fue “adoptado” por los comerciantes como su patrón, ya que en la antigüedad una buena cosecha de arroz significaba grandes ingresos para los granjeros. Por lo que obtener el favor de Inari, supone prosperidad en tu negocio.

Así, la ingente cantidad de torii que vemos, han sido “plantados” por comerciantes de todo Japón para que el dios Inari les sea propicio, según su tamaño, la tarifa por tener un torii en el santuario puede ascender a miles de euros, y aun así, a pesar de que no es nada barato tener uno, a lo largo de los 4 kilómetros de caminos que recorren el santuario podemos encontrar más de 30000 torii, algunas veces tan juntos que parece que forma un pasadizo techado, aunque según subimos la montaña van separándose más y más, por la parte trasera según caminamos, podemos ver la inscripción con el nombre del donante o donantes.

Situado a las afueras de Kioto, en la localidad de Fushimi, llegar a el es muy fácil desde la estación de Kioto, encontrándose tan solo a unas pocas paradas en tren.

Así con este fácil acceso y con su fama que ha ido aumentando estos años con las redes sociales y el cine (aparece en la película Memorias de una Geisha), podéis haceros una idea de la cantidad de gente que pasea entre sus torii, y es que si queremos tomar fotos como la que veis, una de dos, o madrugamos y vemos el santuario con los primeros rayos del sol filtrándose entre los torii o lo dejamos para última hora, cuando ya no hay casi sol, incluso podemos visitarlo de noche, ya que el santuario está abierto siempre, eso si no hay iluminación por lo que tendremos que llevar una linterna con nosotros, y recalcar además que se encuentra en un monte, rodeado por un bosque en el que viven animales salvajes como monos y jabalíes.

Caminar por Fusimi Inari es una experiencia muy agradable sobre todo si lo hacéis en las horas de menos afluencia de gente, sin el griterío, escuchando el viento entre los arboles que rodean el camino, parándoos en cada uno de los pequeños santuarios repartidos por todo el monte, y alcanzando la cima y el santuario principal, y no quedándose a medio camino como hace mucha gente. Eso sí, en verano suele hacer un calor agobiante por lo que os recomiendo llevar agua con vosotros, aunque hay varios puntos donde comprar en el trayecto. Os recomiendo también parar en los pequeños santuarios y recorrerlos hasta el más pequeño recoveco, así rodeados de naturaleza, con el musgo cubriendo el suelo tienen un encanto único y un aire místico.


No hay comentarios:

Publicar un comentario