Roma es conocida por su patrimonio histórico, siglos y siglos de historia escondidos en sus entrañas, pero Roma también es una ciudad en la que se puede disfrutar de otras actividades, y por supuesto cuenta con varios de esos inmensos parques que dan "vida" a sus habitantes, Villa Borghese es uno de los más conocidos, con diferentes estilos en sus jardines y sus numerosas edificaciones bien vale la pena dedicarle unas horas de tu visita a la historia ciudad. En su interior, en sus 80 hectáreas, podemos encontrar museos, y amplios senderos repletos de naturaleza. Un punto muy llamativo es el que veis en la foto, el lago que rodea al templo de Esculapio.
Es
llamado así, porque en su interior se encuentra la estatua original
griega del dios romano de la medicina y la curación. Dicha estatua fue
encontrada entre las ruinas del Mausoleo de Augusto y situada en este pequeño templo rodeado de un hermoso lago y preciosos jardines, una zona que es un remanso de tranquilidad, en el que podéis observar barcas a pedales recorriendo el lago, cisnes y patos nadando por sus aguas salpicadas por peces y pequeñas tortugas. Un lugar en el que merece la pena pararse a descansar, respirar y tomar unas fotografías.
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