Ahora mismo debería de estar a punto de salir el vuelo que nos llevaría a Bélgica, una semana por el país en el que principalmente asistiríamos a un festival de música, pero en la que aprovecharíamos para visitar algunos puntos de interés por el camino. Pero no pudo ser, toca quedarse en casa, pero como he dicho más veces, estoy en una de las casas más bonitas del mundo, así que hay que aprovechar, y si es con la familia, mejor que mejor.
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